Hoy he tenido la suerte de ojeando el periódico de hace algunos días encontrar un artículo que, no solo por el valor de las palabras me ha parecido interesante sino tambien por el de su autora, la tristemente famosa Irene Villa, y digo tristemente porque ha tenido que serlo despues de ser víctima de un atentado terrorista de ETA hace ya algunos años. Una mujer de raza, de carácter, hecha asi misma por la experiencia de la vida, una mujer de esas que como sabéis me encantan, una de esas mujeres bravas. A continuacion reproduzco su artículo.
"Asumida ya la situación de alerta ante la crisis, nos dicen que no podemos saber cuando veremos la luz al final del túnel. Sin las perspectiva deun frente común capacitado para salir de ésta, a falta de medidascombativas cien por cien, con la indefensión provocada derramada por doquier, propongo sustituir los psicofármacos, que corren ya por nuestro país como la pólvora, por pensamientos que ayuden a salvar este trance. Las dificultades sirven para reorganizarnos y progresar. Nos hacen más sabios, mas fuertes, más maduros. Las antiguas civilizaciones que no se adaptaban a nuevos desafíos estaban condenadas a extinguirse. Lo se. El paro no es ningún desafio. Es un drama que comparten demasiadas familias. Pero ese tiempo, ahora eterno, puede emplearse, por ejemplo, en ayudar a los demás. Encontrar el sentido a lo que vemos como una catástrofe, supone no rendirse. No perder la ilusión. Podemos centrarnos en lo que la crisis no puede quitarnos para no sucumbir. El entusiasmo, la integridad y la bondad nunca estarán en crisis, justo lo vital para ser feliz. Quien sabe si esta crisis, que está destruyendo los sueños de tanta gente, reconstruya valores tan necesarios como la umildad, lagratitud y el amor. Aceptar lo perdido,sin amarguras ni resentimientos, cuidar las relaciones sociales y querer lo que se tiene, importa hoy más que nunca. Una sonrisa provoca por si sola un estado de ánimo positivo. Además es contagiosa. Es inútil malgastarenergías despotricando acerca de políticos, de lo que tenían que hacer y no hacen,de la poca esperanza que inspiran, de lo sucio que juegan a veces, de despilfarros e irregularidades al tiempo que nos piden austeridad.... austeridad inevitable, por cierto, pero que nos puede enseñar algo. La publicidad nos enseñó a necesitar. Quizás sea éste elmejor momento para demostrar que lo verdaderamente necesario es gratis. Está dentro de cada uno de nosotros. Ojalá que la grave situación que vivimos saque lo bueno de nosotros, brillemos con más luz y nos haga más fuertes".
Precioso artículo. Ahora decidme vosotros. ¿Valdrá la pena esta crisis para salir de la crisis de valores?
Has elegido publicar algo de una persona que, para mi, es un ejemplo de superación.
ResponderEliminarHe tenido la suerte de conocerla en persona, y puedo decirte que simplemente verla impacta, porque si lo que se espera ante ella es sentir pena, desde luego, es todo lo contrario.
Aunque por desgracia, su experiencia le ha marcado de por vida, son precisamente las vivencias las que forjan como somos. Y ella es excepcional, sin duda alguna.
Te felicito por tu elección de mujer de raza.